A pesar de que se han compartido hasta la saciedad los numerosos beneficios de la lactancia materna, aún hay personas a las que les molesta que las madres den el pecho en público, algo totalmente natural.
Hoy en día, además, muchas mujeres sienten temor o vergüenza de amamantar en público. De ahí que iniciativas como la habilitación de salas de lactancia en instituciones públicas sean aún necesarias y bienvenidas.
Así, aunque desde Bebés y Más defendemos la lactancia en público, aplaudimos que se facilite la lactancia siempre, como ha hecho ahora la Universidad de Vigo, la primera institución educativa de Galicia y la cuarta de España en tener salas de lactancia en sus campus, para favorecer una mejor reincorporación de las trabajadoras y alumnas tras la baja maternal.
Con cambiadores, sillas específicas y neveras
La idea de la instalación de estas salas se fraguó hace un año cuando personal de varias facultades demandaron a la Unidad de Igualdad la necesidad de disponer de un espacio para poder extraerse la leche al estar en el periodo de lactancia y una investigadora les cedió su despacho.
Así lo explica Águeda Gómez, directora de la Unidad de Igualdad de esta universidad, porque "no queremos convertirnos en una institución que desincentiva la lactancia materna, que nunca más una mujer de la Universidad que opte por la lactancia se vea obligada a abandonarla".
Se han instalado dos salas de lactancia en el campus de Vigo (en el edificio Filomena Dato y en el centro de investigación Cinbio) y otras dos, en el de Pontevedra (en la Escuela de Ingeniería Forestal y en la Facultad de Bellas Artes). En breve, se inaugurará una quinta en el de Orense (en la Biblioteca Rosalía de Castro).
"Identificamos los elementos fundamentales para montar las salas, tanto para dar el pecho 'in situ', como para extraer leche y acabar con la penosa experiencia de muchas trabajadoras de la Universidad que tenían que ir a los baños, algo que producía poca garantía de seguridad e higiene".
De ahí, comenta Águeda Gómez, que las salas cuenten con espacios habilitados para extraer leche, cojines, sillas específicas, cambiadores, cortinas y neveras para "acabar con la penosa experiencia de las trabajadoras de tener que ir al baño".
Con estas salas la Universidad de Vigo atiende a recomendaciones sobre lactancia materna que realizan distintos organismos, como la Organización Mundial de la Salud y la Asociación Española de Pediatría (AEP), que la señalan como la forma más saludable de alimentar a los bebés, en exclusiva durante los seis primeros meses de vida y, a demanda, hasta los dos años, junto con los sólidos.
El cuarto campus en España con salas de lactancia
La Universidad de Murcia fue pionera en la instalación de una sala de lactancia ya en 2009.
La siguió la Universidad de Valencia, que inauguró en 2018 distintos espacios de conciliación con varias salas polivalentes de lactancia destinadas, y en marzo de este año fue la Universidad de Sevilla (US) la que presentó su primera sala de lactancia, incluida dentro de su nuevo programa de actividades denominado 'Miércoles Violetas', una medida de conciliación.
Ahora, estas universidades cuentan con salas de lactancia, que deben ser un espacio privado y tranquilo, asignado para que las madres que dan el pecho puedan entrar y amamantar a sus bebés.
La idea de estos espacios es facilitar el momento de la lactancia a los bebés, cuando se encuentran fuera de casa, para que no se distraigan con las personas que pasan o los ruidos, y así pueda comer lo que necesita sin que él ni su madre tengan dificultades.
Fuente | Universidad de Vigo
Foto | iStock
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