Lucy Ortega
El consumo de alcohol en menores de edad es un tema que preocupa a muchos. De acuerdo con datos recientes del Congreso, la edad media de inicio del consumo de alcohol en España es demasiado precoz: 14 años para el consumo ocasional y 15 años para el semanal.
Como sabemos, la prevención y la intervención precoz son clave, pues es importante educar a nuestros hijos para que eviten consumirlo durante la adolescencia.
Algunos padres, en el afán de evitar que sus hijos beban alcohol a sus espaldas, permiten que lo hagan bajo su supervisión, pensando que, al saciar su curiosidad y no tener la tentación de hacerlo a escondidas, evitarán problemas como el alcoholismo u otras conductas de riesgo.
Sin embargo, una investigación reciente ha señalado que permitir que los menores de edad beban supervisados por un adulto es una práctica en la que no debemos caer, pues más que evitar problemas, los aumenta.
Así lo ha señalado el estudio publicado en la revista Addictive Behaviors, donde se reveló que proporcionar bebidas, o incluso simplemente dejar que los menores de edad prueben alcohol, está vinculado con un mayor consumo de alcohol y problemas relacionados con el alcohol en el futuro.
De hecho, uno de los principales descubrimientos de esta investigación fue que se encontró una sólida relación entre el permiso parental para consumir alcohol durante la adolescencia y el aumento de la frecuencia y cantidad del consumo de alcohol, así como los síntomas del trastorno por consumo de alcohol y los daños relacionados con el alcohol en la adultez temprana.
A diferencia de otros estudios similares, en éste se tomo en cuenta la edad de inicio del permiso parental, para revisar si había alguna relación entre ella y el consumo posterior de alcohol. Pero los resultados señalaron que el efecto negativo es uniforme, es decir, no hubo diferencias según la edad en la que los menores bebieron alcohol.
Por ello, los autores del estudio concluyen que es importante corregir esta forma de pensar que tienen algunos padres, pues no hay ningún beneficio en dejar beber alcohol a los adolescentes, sino todo lo contrario: "Los mensajes de salud pública dirigidos a los padres deben buscar corregir las percepciones del consumo supervisado de alcohol como una estrategia de reducción de daños, y enfatizar el daño que supone el permiso de los padres para consumir alcohol, independientemente de la edad".
Foto de portada | Familia en Freepik
Ver 0 comentarios