Durante el embarazo, de importante que cuidemos mejor ciertos aspectos de nuestra salud y nuestro estilo de vida. Uno de ellos, es nuestra dieta, pues durante esta etapa debemos consumir todos aquellos alimentos que ayuden a nuestro bebé a tener un desarrollo saludable.
Uno de los productos que se recomienda consumir a las mujeres que están esperando un bebé es la leche, y de acuerdo con un nuevo estudio, consumir de dos a tres raciones de leche y productos lácteos diariamente durante el embarazo, contribuye de forma positiva al peso y longitud del bebé.
Publicado en la revista Advances in Nutrition, la investigación consistió en un análisis de 17 estudios cuidadosamente seleccionados, con la finalidad de evaluar la influencia del consumo de leche y productos lácteos durante el embarazo y la lactancia.
En ella, se revisó principalmente cuáles eran los efectos derivados del consumo de estos alimentos por parte de la madre, en indicadores importantes del bebé, como su peso y longitud al nacer, así como la longitud del fémur, la circunferencia de la cabeza, el aumento de peso durante el embarazo, y también su influencia en posibles complicaciones del embarazo, como parto prematuro o aborto espontáneo y en el valor nutricional de la leche materna.
Se concluyó que consumir de 2 a 3 raciones o porciones diarias de leche y otros derivados lácteos beneficia al desarrollo del bebé, particularmente en su peso y longitud al nacer, en comparación con la ausencia o cantidades muy bajas del consumo de estos productos durante el embarazo.
En el caso de las complicaciones mencionadas, los investigadores comentan que la poca cantidad de estudios impide sacar conclusiones relacionadas con ellos, así como de los efectos directos del consumo de leche durante la lactancia sobre el valor nutricional de la leche materna, por lo que es necesario continuar haciendo estudios al respecto.
Como sabemos, la leche es la principal y mejor fuente de calcio, y durante el embarazo éste es fundamental para que el bebé pueda formar sus huesos, dientes, corazón, sistemas de coagulación y músculos.
Pero además del calcio, la leche es fuente de vitaminas A, B2 y B12, vitamina D, así como de minerales como el sodio, el magnesio, el potasio y el fósforo, de hidratos de carbono (lactosa), grasas y proteínas de alta calidad, que son indispensables para el desarrollo de tejidos y órganos.
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Vía | Infosalus