Una persona tóxica es alguien que, consciente o inconscientemente, emana negatividad, desgastando emocionalmente a quienes le rodean y restándoles energía. Y todos, en un momento u otro de nuestra vida, probablemente nos encontraremos ante alguien así.
Alejarse de las personas tóxicas es clave para preservar nuestra paz mental y felicidad interior, pero no siempre es sencillo identificarlas, pues muchas de ellas tienden a ser carismáticas o sus comportamientos tóxicos son tan sutiles que podrían pasar desapercibidos.
Sin embargo, hay un truco que nos puede ayudar a reconocerlas casi desde el inicio, para alejarnos de ellas antes de que causen daño: la observación consciente.
Como su nombre lo dice, la observación consciente consiste en ver más allá de la imagen de una persona. Es decir, en vez de quedarnos solo con la primera impresión o en la parte superficial, habremos de prestar especial atención a ciertos comportamientos.
Hacerlo, nos ayudará a detectar actitudes, opiniones y acciones sutiles que, de no observar con intención y atención, podrían pasar desapercibidos, especialmente si se trata de alguien que acabamos de conocer.
Cómo aplicar la observación consciente
En lo personal hay un par de cosas en particular que intento observar de manera consciente para saber si me encuentro ante una persona tóxica: su actitud y la manera en la que se expresan, tanto al decir como sus opiniones como al hablar de otros.
Observar estas cosas nos ayudará a notar si encontramos en ellas comportamientos tóxicos, como los siguientes:
Negatividad constante
Las personas tóxicas tienden a emanar negatividad de manera constante. Ya sea a través de críticas o quejas, cuando nos encontramos ante una persona tóxica podemos sentir y reconocer el pesimismo en sus opiniones.
Eso sí, hay que tener presente que también existe la posibilidad de que esa persona solo esté teniendo un mal día, así que es importante que observemos si esa negatividad consiste solo en algo específico (como algún inconveniente) o si se trata de algo más.
Lo que dicen y cómo lo dicen
Identificar a una persona tóxica puede no ser sencillo porque suelen ser personas que hacen comentarios pasivo-agresivos o dicen cosas que parecen elogios pero en realidad esconden una crítica o buscan manipular a los demás.
En este sentido, podemos identificar si se trata de una persona tóxica observando si hay o no empatía en su manera de comunicar. Si hacen comentarios desconsiderados o insensibles, posiblemente nos encontremos ante alguien tóxico.
Dónde ponen la culpa
Esto, que lo hemos explicado a mayor detalle en otra ocasión, puede detectarse haciéndonos esta pregunta: ¿son personas que saben reconocer las cosas y admitir responsabilidad, o siempre buscan culpar a alguien o algo más?
Por lo general, las personas tóxicas no demuestran respondabilidad en sus acciones ni intentan corregir sus fallos, sino que tienden a culpar a los demás por lo que les sucede o intentan justificar sus comportamientos tóxicos.
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