Se graba todo un día para responder a quienes creen que las madres que se quedan en casa no hacen nada

Se graba todo un día para responder a quienes creen que las madres que se quedan en casa no hacen nada
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Son muchas las personas que piensan que las madres que se quedan en casa son afortunadas y "no hacen nada", como si cuidar de los hijos fuese equiparable a unas vacaciones por el hecho de no salir a trabajar fuera de casa.

Es lo que le pasó a la influencer y madre de gemelas Maya Vordestrasse, a quien ya os hemos presentado. Una mujer le dijo que las madres que se quedan en casa no hacen nada, a lo que ella decidió responderle grabando un vídeo de todo lo que hace durante el dia.

El día de una madre que se queda en casa

Junto a la publicación, Maya envía un mensaje a la mujer, quien también demuestra tener una visión bastante retrógrada del papel del padre:

"Hoy voy a educar a la mujer que tuvo el coraje de decirme que no hago nada en todo el día porque soy una madre que se queda en casa, y pobre mi esposo que llega a casa muy cansado de su trabajo real y todavía tiene que AYUDAR con los niños. Así que aquí tienes, un vistazo a lo que hace una mamá que se queda en casa todo el día y confía en mí, fue un día fácil".

Hay muchas escenas con las que seguro te sentirás identificada. Hacer pis mientras le cepillas los dientes, recoger los juguetes, llantos, preparar la comida, ayudarlas a que duerman la siesta (y por favor no se despierten pronto), hacer lo que sea para entretenerlas un rato... Recoger de nuevo.

¿Y las que además trabajan fuera de casa?

De ninguna manera es una comparación. Con el vídeo no quiere decir que el día de una madre que trabaja fuera de casa sea fácil. Ser madre no es fácil, ni para quienes se quedan en casa ni para las que salen a trabajar fuera. No es una competencia de para quién es más duro. Como todo, cada situación tiene sus ventajas y desventajas.

Para aquellas (o aquellos -también hay padres-) que se quedan en casa es duro estar todo el día al cuidado de uno, dos o más niños pequeños que requieren de nuestra atención las 24 horas. Es solitario, cansado y poco agradecido. Aquellas que trabajan en una oficina o fuera de casa, cuando vuelven (agotadas y estresadas), tienen además que ocuparse de la casa y de los niños en poco tiempo. Muchas veces sintiéndose culpables por no poder pasar más tiempo con ellos.

Todas las madres, tanto las que se quedan en casa como las que trabajan fuera, cada una con lo que ha decidido o lo que sus posibilidades le permiten, hacen un gran esfuerzo para hacer felices a sus familias.

Así lo explica Maya en su publicación:

"Criamos a los niños, trabajamos sin parar en la casa, cocinamos, limpiamos, hacemos recados, algunas trabajamos desde casa, otras van al trabajo y regresan a casa para seguir haciendo todo eso. Puede ser tan aislado, frustrante, agotador, pero aún así es maravilloso estar presente en cada momento de la vida de nuestros hijos. Todos estamos haciendo nuestro mejor esfuerzo para hacer felices a nuestras familias".

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