
El suavizante para la ropa es, para muchas personas, un paso esencial al momento de lavar nuestras prendas: ayuda a que la ropa se sienta más suave y tenga un mejor olor.
Sin embargo, a algunas personas el uso de este producto no les convence mucho, pues se ha reportado que es poco ecológico e incluso puede hacer que ciertas telas pierdan su capacidad de transpiración, como en el caso de algunas prendas deportivas.
Si deseas disminuir el uso del suavizante en casa, ya sea por estos motivos o por ahorrar, pero quieres que tu ropa huela bien tras lavarla, hay un simple método que puedes probar: el truco del calcetín.
Como podrás imaginar, este truco casero requiere de un calcetín, pero éste no será el que nos ayude a hacer que la ropa huela fresca y perfumada, sino lo que colocamos en él.
Antes de poner la ropa en la lavadora, moja un calcetín con el aceite esencial de tu elección (lavanda, árbol de té, eucalipto...), asegurándote de que quede impregnado del aroma que has elegido.
Coloca el calcetín junto con la ropa en la secadora y deja que transcurra un ciclo de secado completo. La temperatura de la secadora calentará el aceite esencial y ayudará a que el aroma se impregne aún más en la ropa.
Siguiendo estos pasos, podrás ahorrarte el suavizante y lograrás que la ropa tenga tu aroma favorito después de lavarla.
Foto de portada | Nikhil y Kalpa Mahagamage en Unsplash