Ayer supimos que el Tribunal Constitucional rechazó por segunda vez el recurso de amparo impuesto por Juana Rivas para no tener que entregar a sus hijos a su padre, Francesco Arcuri, que vive en Italia y que fue condenado en 2009 a tres meses de prisión por maltrato.
Juana, que está en paradero desconocido junto a sus hijos y se la busca desde el 8 de agosto por un presunto delito de desobediencia a la autoridad judicial y otro de retención ilícita de menores, ha anunciado que recurrirá al Tribunal Europeo de Derechos Humanos, el último recurso que le queda.
El Constitucional rechaza su recurso por "extemporáneo"
Hace tan sólo una semana os contábamos la crónica del caso de Juana Rivas, la madre huida con sus hijos de 11 y tres años que se niega a entregar a los niños a su padre, no acatando las sentencias del Juzgado de Primera Instancia de Granada y de la Audiencia Provincial.
Como última opción de jurisdicción nacional, los abogados de Juana decidieron entonces recurrir al Tribunal Constitucional, interponiendo un recurso de amparo en el que solicitaban anular la orden judicial por la que se obligaba a Juana a entregar a los niños. Pero por segunda vez, el Constitucional ha rechazado admitirlo a trámite por "extemporáneo".
Según se indica en El Confidencial, el Tribunal considera que el recurso se ha presentado fuera del plazo de 30 días fijado por la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional (LOTC) desde la notificación de la sentencia de la Audiencia Provincial de Granada, el pasado 26 de abril y culpa de ello a los abogados de Juana.
Tras agotar la vía española, Juana ya ha anunciado que recurrirá al Tribunal Europeo de Derechos Humanos, con el único fin de seguir protegiendo a sus hijos de su padre, al que denunció en 2009 por malos tratos y que fue condenado en Italia a tres meses de prisión.
Una huida que podría acarrear problemas
Desde que se conociera la sentendia de la Audiencia de Granada, Juana está en paradero desconocido con sus hijos, y es precisamente la decisión de huir y no acatar las sentencias de los tribunales lo que podría complicar su caso.
El pasado 8 de agosto, y tras una orden del Juzgado de Instrucción 2 de Granada, la mujer se encuentra en busca y captura y se la investiga por un presunto delito de desobediencia a la autoridad judicial y otro de retención ilícita de menores.
Juana se ha puesto en contacto con los medios de comunicación a través de cartas en las que explica su situación y apela a la Justicia:
"Lo que estoy haciendo no es un desafío, es supervivencia. Esconderme es la única forma que he encontrado a mi alcance como madre para proteger las joyas más preciadas de mi vida. Pero no puede ser para siempre. Por favor, paren esta locura”.
Por su parte, el ex-marido de Juana y padre de los niños, Francesco Arcuri permanece en Granada mientras se resuelve el caso, y afirma en declaraciones al diario El Mundo, no haber perdido nunca la esperanza de volver a ver a sus hijos.