Abril, Biel y Emma forman un triángulo difícil de conciliar, o puede que no tanto. Veréis, son tres niños en esas edades en las que ‘empiezan a enfrentarse al mundo’ sin necesidad de que los padres estén siempre encima, y viven unas vacaciones de verano que prometían ser aburridas (al menos para Abril), y se convierten en una de esas aventuras emocionantes que sólo se pueden vivir cuando uno tiene entre 10 y 14 años.
Abril es la hermana menor de Biel, aunque se convierte en la auténtica protagonista de la historia: es una niña observadora y lista que resuelve el problema más importante que tiene el grupo (aumentado tras llegar al lugar de veraneo). No os miento que lo que me enganchó a este cuento es esta frase en el primer capítulo del libro ‘…tengo un hermano mayor que se llama Biel y que, además, es un monstruo que no deja de amargarme la vida’. ¿Qué por qué me llamó la atención?, quizás fue la curiosidad por saber si esta relación fraternal se parecería a la que mis hijos puedan tener dentro de unos años…, ya sabéis, si lo anticipo podré estar más preparada.
El libro se llama ‘La pelota Japler’, está escrito por Jordi Cervera y editado por Edebé en la colección Tucán (para niños a partir de 10 años). Es una historia que se lee fácil y a la que los niños no les resultará difícil de acercarse, precisamente por esa necesidad de aventuras y de ‘vida independiente’ que empiezan a tener a partir de los ocho años y medio más o menos.
Cuando los padres de Abril y Biel ponen rumbo al pequeño pueblo costero donde pasarán unas semanas, llevan también a Emma, la mejor amiga de Abril, cuyos padres están demasiado ocupados trabajando para poder permitirse unos días libres. A pesar de la amistad, la perspectiva de estar juntas no parece muy esperanzadora porque Emma parece haberse enamorado de Biel (con la de chicos que hay ¿verdad?, ha tenido que escoger a la persona que molesta diariamente a su amiga).
Todo cambia cuando conocen a los que serán sus nuevos compañeros de fútbol y aventura: 9 niños de distinta procedencia que les aceptan sólo porque son tres, y así podrán hacer dos equipos de seis para darle al balón. De esta manera Abril consigue su principal objetivo, Biel dejará de fastidiarla a cambio de que ella acepte continuar en el grupo, de lo contrario lo abandonará, y con ello él perderá la oportunidad de hacer lo que más le gusta.
Partidos de fútbol seguidos de una horchata fresquita en la plaza de la localidad, y el descubrimiento de que ¡son 12!, y de esta forma pueden retar a los del pueblo de al lado para medir sus fuerzas en el campo de fútbol profesional que pertenece a la mansión Japler, es una de esas reglas no escritas que marcan las relaciones entre pueblos vecinos.
Pero la mansión Japler esconde uno de esos secretos de los que apenas nadie habla desde que su propietario desapareció misteriosamente, la curiosidad puede más que la sensatez (nos ha pasado a todos a esa edad), y una vez dentro, ya no podrán salir a no ser que…
Es una aventura fantástica que ninguno de los 12 olvidará, y que a vosotros os recordarán todas las que vivisteis en la niñez, y que querríais también para vuestros hijos, aunque ellos preferirán tener experiencias distintas.
De verdad que no puedo contaros más porque lo que quiero es que propongáis este libro como lectura para vuestros hijos, el verano está cerca, y les puede ocupaa muchas horas. Eso, y también que cuando empiecen a quedar con amigos para ir solos por el pueblo, les recordéis que mejor os digan por dónde van…
ACTUALIZACIÓN: El libro está también disponible en catalán
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