La sociedad transmite cánones de belleza sesgados, pero desde la familia podemos educar a los niños. Entrevista con Marta Ampuero

La sociedad transmite cánones de belleza sesgados, pero desde la familia podemos educar a los niños. Entrevista con Marta Ampuero
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Soy madre de un niño y una niña, eso ya lo sabéis… los padres acabamos aprendiendo un montón de cosas gracias a nuestros hijos y – además -adquirimos competencias que no teníamos, disfrutamos muchísimo con ellos pero por otra parte hay temas que nos preocupan.

Cuando son muy pequeños querríamos protegerles de todo lo que les puede hacer daño, después crecen y entendemos que es mejor guiarles y permitirles que vayan conociendo poco a poco el mundo. Seguro que la salud de vuestros hijos es una de las cosas que más os importa, pero ¿sabíais que un crecimiento saludable no sólo depende de nuestro papel o enseñanzas?

Os cuento todo esto porque me inquieta darme cuenta de que en ocasiones se transmite a los pequeños la búsqueda de la “imagen perfecta” y sé que esto puede ser dañino y ocasionar trastornos alimentarios. Como es un tema complejo he querido traeros a una persona experta en estos temas, para responder mis propias dudas y (quizás) las vuestras.

Ella es Marta Ampuero Ludeña y es coordinadora de programas y proyectos de la Fundación de Educación para la Salud (FUNDADEPS). Marta se licenció en Psicología Clínica y posee formación en terapia Gestalt, también colabora en proyecto educativos y sociales con alumnos de ESO en centros públicos de la Comunidad de Madrid.

Espero que os guste esta entrevista, continuad leyendo si os interesa. Peques y Más.- ¿Qué factores determinan la búsqueda de la “imagen perfecta” en niñas y niños?

Los pequeños quieren seguir modelos de belleza a partir de los 12 o 13 años, aunque también se observan niños y niñas preadolescentes que se plantean estas cuestiones

Marta Ampuero.- Existen múltiples factores que pueden ser determinantes, entre ellos se encuentran:

  • Dentro de la familia: familias con escasa comunicación, con altos niveles de exigencia, muy sobreprotectoras, con grandes preocupaciones por el aspecto físico, poco afectuosas, con malos hábitos de alimentación. Hacen que los niños y niñas no tengan un lugar donde compartir sus preocupaciones generando falsas creencias.

  • En la sociedad: nos encontramos en una sociedad con unos cánones de belleza sesgados, se vende la imagen de que los jóvenes tienen que estar delgados para ser felices y tener éxito en la vida. Además, y más concretamente en las mujeres, es importante tener un cuerpo perfecto, una carrera profesional perfecta, una familia perfecta y ser los padres ideales. Por tanto la imagen modelo que captan los niños es muy radical .

  • Relacionados con el individuo: sabemos que existen ciertas características personales, muy relacionadas con los apartados anteriores, que pueden influir en la búsqueda de “la imagen perfecta”, entre ellas: falta de autonomía personal, de autoestima, ser perfeccionista / controlador o muy exigentes consigo mismo.

PyM.- ¿A qué edad se está empezando a observar que los más pequeños quieran seguir “modelos de belleza” representados en personajes famosos?

M.A.- Suele aparecer en la adolescencia 12-13 años de forma más llamativa, aunque ya existen datos de niños y niñas que en la preadolescencia empiezan a plantearse dichas cuestiones. Estas ideas de cómo debo de ser para tener éxito y que la sociedad me acepte, aparecen cuando el niño o niña se cuestiona ¿Quién soy yo? Y empieza a crear una personalidad propia basada en los modelos que ha tenido (familia, grupo de amigos, sociedad en general…) y en las características personales de las que dispone.

En ocasiones se nos transmite una idea errónea representada en la existencia de un solo ideal de ser, en contraposición de todas la realidades posibles, pues cada uno de nosotros somos diferentes. Si no somos capaces de aceptar la diferencia entre el ideal y nosotros mismos podemos caer en un trastorno alimentario o de cualquier otro tipo

PyM.- ¿Crees que el rápido desarrollo de los medios de comunicación tiene algo que ver, teniendo en cuenta que a los niños les pueden llegar contenidos inapropiados para su edad?

M.A.- Efectivamente los medios de comunicación influyen en la creación de cánones de belleza, los personajes famosos que aparecen en anuncios, películas, series de televisión…etc. crean en los más jóvenes la idea de que para tener éxito o ser famoso se necesita ser de una determinada manera. Normalmente esta manera de “ser” es joven y delgado, además de otras muchas características. Esto genera un estándar de belleza y un rechazo a la forma de ser de cada individuo, radicalizando el pensamiento y evitando las diferencias entre las personas.

Pero la responsabilidad no es de los medios de comunicación, a mi forma de ver los medios de comunicación son un altavoz de lo que ocurre en la sociedad, remarcando aspectos que la propia sociedad ya tiene.

PyM.- Y ¿Hay casos en los que es la propia familia la que incita a los más pequeños para que adopten determinados comportamientos?

M.A.- Seria falso afirmar que la familia es la que incita a los más pequeños a estos comportamientos. Es cierto que los pequeños aprenden de los modelos familiares, como ya hemos dicho anteriormente, y cuanto más rígidos sean estos modelos y menos comunicación haya dentro de la familia, mas ideas equivocadas tendrá el niño o la niña en cuanto sí mismo. La familia debe educar al niño o la niña dejándole que se exprese tal cual es y que esta sea un lugar donde recoger las angustias y preocupaciones para que el pequeño crezca como persona aceptando sus propias características.

PyM.- ¿Qué relación tiene esta tendencia de buscar una determinada imagen con la aparición de trastornos alimentarios?

M.A.- Yo especificaría un poquito más, no es buscar una imagen cualquiera, sino más bien una imagen con unas determinadas características basada en los cánones de belleza actuales donde, como ya he dicho anteriormente, se cree que el ser joven y delgado es sinónimo de tener éxito. Esta idea errónea hace que solo exista un ideal de ser, en contraposición de todas la realidades posibles, pues cada uno de nosotros somos diferentes. Si no somos capaces de aceptar la diferencia entre el ideal y nosotros mismos podemos caer en un trastorno alimentario o de cualquier otro tipo.

Cuanto más cerrado sea el ideal de “como debemos ser” más probabilidades hay de que caigamos en algún tipo de trastorno puesto que deja a más personas fuera de lo que está establecido como bueno. Por eso es tan importante la aceptación de uno mismo con nuestras virtudes y nuestros defectos.

Si existe cualquier sospecha de posible trastorno de la conducta alimentaria es acudir a un especialista en salud mental, el cual realizará un diagnóstico exhaustivo e iniciará el tratamiento correspondiente para cada caso en particular

PyM.- La aparición de estos trastornos ¿Ha ido en aumento en nuestro país?

M.A.- La prevalencia se considera que ha pasado de 0,37% en la década de los 60’ hasta el 4% en la actualidad, según datos recogidos de diferentes estudios. Estos datos muestran casos diagnosticados y no aquellas personas que puedan estar en riesgo de padecer el trastorno o tengan algún síntoma. Nueve de cada diez casos son mujeres aunque cada vez aumenta más la población masculina con este problema.

PyM.- ¿Qué síntomas nos podrían indicar que existe la posibilidad de que uno de nuestros hijos está desarrollando un trastorno alimentario? ¿Cómo deberíamos actuar si existen sospechas?

M.A.- Existen múltiples síntomas y aunque muchos de ellos son comunes a todos los trastornos alimentarios, existen diferencias según el tipo de trastorno. A continuación se muestran algunos de los posibles síntomas:

Algunos síntomas de padecer Anorexia: negación a mantener un peso igual o superior al valor mínimo que corresponde a su edad y altura, pérdida importante de peso,distorsión de la realidad corporal, reducción del consumo de alimentos, especialmente los que contienen más grasa o calorías, aumento exagerado del ejercicio físico, evitación de “comer acompañado” y consumo de diuréticos y laxantes, entre otros.

Algunos síntomas de padecer Bulimia: comer descontroladamente, sensación de no poder parar de comer, ayunar o hacer dietas muy rigurosas, vómitos provocados, mentiras para no ser descubiertos, aspecto aparentemente saludable (cosa que hace más difícil detectar la enfermedad), preocupación por el propio peso o menstruaciones irregulares entre otros.

Mi recomendación si existe cualquier sospecha de posible trastorno de la conducta alimentaria es acudir a un especialista en salud mental, el cual realizará un diagnóstico exhaustivo e iniciará el tratamiento correspondiente para cada caso en particular.

Es importante que la familia aprenda a manejar, expresar y aceptar las emociones de cada miembro de la familia para que se pueda tener una buena comunicación que favorezca un clima de apoyo y ayuda en caso de que el niño o la niña, o cualquier otro miembro de la familia lo necesite

PyM.- ¿Cómo abordar este tema en familia? Quiero decir ¿Cómo desviar la atención de los niños respecto de la búsqueda de una determinada imagen?

M.A.- La clave está en aceptar las características personales que nos diferencian de los demás, es decir aceptarse uno mismo tal cual es. Si logramos crear un ambiente familiar de aceptación y de buena comunicación en la que todos los miembros sean capaces de expresarse tal cual son, tendremos el camino hecho.

Si los adultos somos capaces de trabajar esto con nosotros mismos, conseguiremos que nuestros hijos lo aprendan, puesto que somos un modelo para ellos y podrán ser capaces de cuestionarse otros modelos más dañinos.

PyM.- ¿Qué consejos puedes dar a los padres para ayudar a proteger a los niños en este complejo tema?

M.A.- Es fundamental que la familia facilite el desarrollo y la autonomía personal del niño o la niña dejando que se equivoquen y aprendan de sus errores, apoyando sus cambios en cuanto a la hora de vestir, de estudiar...etc, aceptando los límites que establece el niño sin crear grandes expectativas que queden fuera del alcance del niño o la niña y respetando la intimidad del niño para que se acepte y conozca mejor.

También es importante que la familia aprenda a manejar, expresar y aceptar las emociones de cada miembro de la familia para que se pueda tener una buena comunicación que favorezca un clima de apoyo y ayuda en caso de que el niño o la niña, o cualquier otro miembro de la familia lo necesite

Una familia que acepta la imagen corporal de cada uno de sus miembros ayuda a la aceptación de las diferencias y en consecuencia a la aceptación de uno mismo, lo cual nos ayuda a crecer como personas evitando posibles trastornos.

Tras la entrevista querría manifestar a Marta Ampuero que a mí personalmente me ha resultado muy enriquecedora e instructiva, y también deseo trasladarle mi agradecimiento por su colaboración en Peques y Más. Así que gracias a Amparo por habernos traído toda esta información tan necesaria y también a Hernán (de FUNDADEPS) por habernos ayudado a materializar la entrevista.

Imagen | Marta Ampuero Más información | FUNDADEPS En Peques y Más | Trastornos alimentarios en los niños y adolescentes ¿cómo detectarlos y actuar?

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