Lucy Ortega
Vivir la Navidad con hijos es revivir esa magia de la época una vez más: les contamos de Papá Noel y los Reyes Magos, les ayudamos a escribir su carta y disfrutamos mucho ver sus caritas de sorpresa e ilusión al despertar y encontrar que, durante la noche, han llegado regalos para ellos.
Pero, como ya sabemos, eventualmente nuestros hijos crecerán, se convertirán en preadolescentes y descubrirán que, en realidad, los padres hemos estado detrás de todos esos momentos mágicos de sus primeros años.
Sin embargo, el hecho de que nuestros hijos ya no crean en Papá Noel o en los Reyes Magos no significa que no puedan vivir la magia de la época.
Te cuento cómo puedes seguir conectando con tus hijos preadolescentes y vivir una Navidad con ilusión. Porque un poco de magia siempre nos viene bien a todos.
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Invítalos a ser elfos de Papá Noel
Que nuestros hijos se hayan hecho mayores y hayan dejado de creer en este personaje no significa que no puedan participar de ella. Una bonita manera de hacerlo es invitándoles a ocupar un puesto muy especial: un elfo de Papá Noel.
¿Su función principal? Ayudarnos a continuar la magia para los más pequeños de la familia. Además de sentirse involucrado, le ayudará a vivir la magia de las Navidades desde una perspectiva nueva y especial.
Comiencen una nueva tradición
Quizás las cartas a Papá Noel o a los Reyes Magos ya no le apetecen ahora que sabe que son sus padres, pero este no es el único ritual navideño que pueden compartir. Que nuestros hijos sean mayores nos abre las puertas para compartir aún más experiencias y crear nuevas tradiciones con ellos.
Por ejemplo, este año pueden hornear galletas y convertir ese momento en una tradición anual durante la Navidad. Otra idea bonita es fijar una mañana para pasarla en pijama y ver alguno de los muchos desfiles navideños disponibles en YouTube.
Disfruten las decoraciones y luces navideñas
Foto | Jeshoots en Pexels
No conozco a nadie que no se emocione con las luces navideñas. Aprovechen que muchos sitios están decorados para salir a pasear y disfrutar del ambiente navideño de su comunidad. Seguro encuentran algo bonito e incluso pueden tomarse una fotografía para recordar ese lindo momento.
Organicen noches de cine navideño
La magia de la Navidad no se limita a los regalos, Papá Noel o los Reyes Magos. La magia de la Navidad también se vive en las historias que vemos y en los momentos que disfrutamos juntos. Y si hay algo que nos invita a continuar disfrutando de esta época, son las películas navideñas.
Organicen una tarde de cine navideño y elijan algo entre ambos, desde su película navideña favorita hasta una película clásica que les ayude a recordar y mantener vivo el espíritu navideño.
Tardes de manta y chocolate caliente
Finalmente, otra idea fácil y bonita para conectar es tener tardes de manta y chocolate caliente (o la bebida de su elección) y compartir un momento para hablar sobre su día, sobre lo que les gustaría hacer en Navidad, lo que más les gusta de la época, etcétera.
Foto de portada | Freepik
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