Los estudios de psicología del color sugieren que los colores evocan reacciones psicológicas que afectan el estado de ánimo y las emociones. Y esto influye, por ejemplo, a la hora de estudiar.
Imagina a tu hijo sentado frente a sus apuntes, rodeado de subrayadores de todos los colores. ¿Alguna vez te has preguntado si el color que elige para resaltar la información podría influir en su capacidad para recordarla? La psicología del color sugiere que sí.
Diversos estudios han demostrado que ciertos colores pueden mejorar la memoria y la atención, algo que podría ser clave para optimizar las sesiones de estudio de tu hijo.
1) El rojo: atención y memoria
El rojo es un color que naturalmente atrae la atención. Un estudio realizado por Juliet Zhu y Ravi Mehta en la Universidad de British Columbia, publicado en la revista Science, encontró que el rojo mejora la atención al detalle y la memoria.
Esto se debe a que el rojo está asociado con señales de advertencia y peligro, lo que activa una respuesta de vigilancia en el cerebro.
- Aplicación: Anima a tu hijo a utilizar un bolígrafo rojo para subrayar fechas importantes, fórmulas o definiciones clave. Este uso estratégico del rojo puede ayudar a que la información crítica se destaque y sea más fácil de recordar.
2) El azul: calma y concentración
Según la psicología del color, el azul tiene un efecto calmante que puede mejorar la concentración y la retención de información. El mismo estudio de Zhu y Mehta también encontró que el azul fomenta la creatividad y el pensamiento expansivo. Esto es especialmente útil durante sesiones de estudio prolongadas, donde mantener la concentración es esencial.
- Aplicación: Sugiere a tu hijo que utilice papel azul o subrayadores azules para temas que requieran una comprensión profunda, como la lectura de textos complejos o la resolución de problemas matemáticos. El ambiente azul puede ayudar a mantener la mente tranquila y enfocada.
3) El verde: equilibrio y memoria a largo plazo
El verde está asociado con la naturaleza y la tranquilidad, y por ende puede reducir la ansiedad y mejorar la memoria a largo plazo. Un estudio publicado en Verywell Mind señala que el verde puede mejorar la concentración y la eficiencia en el aprendizaje.
- Aplicación: Recomienda a tu hijo que estudie en un entorno con elementos verdes, como plantas o paredes pintadas de verde suave. También puede utilizar carpetas o cuadernos verdes para materias que requieran memorización a largo plazo, como historia o biología.
Experimentar con diferentes colores
Aunque a priori lo pareazca, la elección de colores en el entorno de estudio de tu hijo no es una cuestión trivial. Los colores influyen.
Pero recuerda que cada niño es único, y es importante observar cómo responde tu hijo a diferentes estímulos. Experimenta con estos colores y ajusta según lo que funcione mejor para él. La idea es lograr que la experiencia de estudio sea más efectiva y agradable para él.
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