Las ensaladas en bolsa no son "listas para comer", y menos si estás embarazada: detectan toxoplasmosis en una de cada 25

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Laura Ruiz Mitjana

Una reciente investigación financiada por la Unión Europea y liderada por científicos españoles, ha encendido las alarmas en el ámbito de la salud alimentaria.

Publicado en la revista Eurosurveillance, el trabajo ha detectado el parásito Toxoplasma gondii en el 4,1% de las ensaladas en bolsa vendidas en supermercados de 10 países europeos, incluida España.

Esto significa que una de cada 25 ensaladas puede estar contaminada. Un dato especialmente preocupante para embarazadas y personas con sistemas inmunitarios debilitados.

Un riesgo en productos “listos para consumir”

El Toxoplasma gondii es un protozoo que, en personas sanas, suele provocar síntomas leves o pasar desapercibido. Pero en mujeres embarazadas, la infección puede ser peligrosa: puede transmitirse al feto y causar desde lesiones oculares hasta daños neurológicos graves, como hidrocefalia o calcificaciones cerebrales.

“El problema es que muchas mujeres piensan que las ensaladas envasadas están listas para comer tal cual, sin lavar, y no siempre es así”, advierte María Ángeles Sánchez, responsable de Diagnóstico Prenatal del Hospital Vall d’Hebron, citada en El País.

El estudio muestra que los actuales procesos industriales de lavado no garantizan la eliminación total del parásito. “Un solo ooquiste puede causar la infección”, subraya Rafael Calero-Bernal, autor principal del estudio e investigador de la Universidad Complutense de Madrid.

¿De dónde viene la toxoplasmosis?

El parásito llega a los cultivos principalmente a través de las heces de gatos que viven al aire libre, explica Isabel de Fuentes, investigadora del Centro Nacional de Microbiología. Estos animales, al infectarse, eliminan millones de ooquistes en sus deposiciones.

Posteriormente, la lluvia, el riego o el movimiento de tierras pueden transportar estos ooquistes a campos de cultivo, contaminando las verduras. Por eso, la contaminación no solo se da en ensaladas en bolsa.

También puede encontrarse en vegetales frescos, sobre todo si no se han lavado adecuadamente, o incluso en la carne cruda o poco cocinada, como el jamón curado o los embutidos. “La carne debe alcanzar los 80 ºC al cocinarla o, en el caso de embutidos, congelarse al menos 48 horas a -18 ºC para destruir el parásito”, aclara De Fuentes.

Embarazo y prevención: lo que puedes hacer

La mayoría de mujeres embarazadas no saben si han pasado o no la toxoplasmosis. Si no han tenido contacto previo con el parásito, no tienen anticuerpos y son más vulnerables.

Por eso, los expertos recomiendan hacerse una prueba al inicio del embarazo para conocer su inmunidad y extremar precauciones para evitar el contagio de toxoplasmosis.

Así que, si estás embarazada o estás buscando embarazo, no te fíes del etiquetado de las ensaladas que promete ser “listas para consumir”. Aquí algunos consejos:

1) Lávalas incluso si pone “listas para consumir”

Lava igualmente la ensalada con agua abundante, ya que, como hemos visto, la toxoplasmosis se transmite por un parásito que puede estar en el suelo y no siempre se elimina en el proceso industrial.

Puedes ponerlas en un colador y enjuagarlas bajo el grifo durante al menos 30 segundos.

2) Desinfecta con una solución apta para alimentos

Para mayor seguridad, puedes usar una solución desinfectante alimentaria (como unas gotas de lejía apta para alimentos o productos específicos tipo Amukina).

Por ejemplo, disuelve tres gotas de lejía alimentaria por cada litro de agua y deja las hojas en remojo durante 5-10 minutos; luego aclara bien con agua potable.

3) Seca bien con papel de cocina limpio

Después de lavarlas y desinfectarlas, sécalas cuidadosamente con papel de cocina de un solo uso, ya que la humedad favorece el crecimiento de microorganismos. Evita trapos de tela reutilizables, ya que pueden contener bacterias si no se lavan a altas temperaturas.

Y si puedes, opta por vegetales cocinados o escaldados en lugar de crudos durante el embarazo, especialmente si tienes dudas sobre su origen o manipulación previa.

Foto | Portada (Montaje; Freepik 1 y Freepik 2)

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