Los siete beneficios para los niños de aprender a jugar al ajedrez
Educación Infantil

Los siete beneficios para los niños de aprender a jugar al ajedrez

Una de las grandes aficiones de mi hijo es jugar al ajedrez. Concentrarse en la partida y desarrollar estrategias que acaben con el rival en pocas jugadas, le suponen un reto que le hacen crecer, aprender y motivarse mientras se divierte.

Mucha gente cree que el ajedrez es algo muy complicado y, por tanto, poco apropiado para los niños. Pero nada más lejos de la realidad. Es un deporte fabuloso para los peques y con múltlipes beneficios y ventajas para su desarrollo. ¡Te lo contamos!

Mejora la memoria

Una de las primeras cosas que hay que memorizar cuando se va a aprender a jugar al ajedrez es el nombre de las figuras, su valor y sus movimientos. El ajedrez tiene seis tipos de figuras diferentes y cada una de ellas tiene su propio movimiento en el tablero.

fichas de ajedrez

Al principio los niños aprenderán los movimientos más básicos y fáciles, pero muy pronto habrán memorizado cómo se desplazan el resto de piezas, sabiendo moverlas en diagonal, hacia delante y hacia atrás o saltando.

Mejora la concentración y atención

Para jugar al ajedrez es importante estar concentrado en la partida y prestar atención a los movimientos de tu rival. Pero la concentración que adquieren los niños que juegan al ajedrez va mucho más allá, y se ha demostrado que aquellos alumnos que lo practican tienen una mayor capacidad de concentración en el resto de asignaturas que otros compañeros.

concentracion

Además, según recoge la revista online Neurología, el ajedrez podría ayudar a los niños con TDAH a mejorar su concentración y comportamiento. Esta afirmación se basa en un estudio llevado a cabo en 2012 en donde se vio que los menores con TDAH que habían practicado ajedrez habían mejorado su comportamiento general y su atención, logrado controlar su impulsividad, su postura corporal y favorecido el hábito de estudio.

Del mismo modo, y según este estudio, los niños con TDAH que continuaron jugando al ajedrez de forma regular llegaron incluso a reducir el consumo de medicación y alcanzar mejores resultados académicos.

Mejora el razonamiento matemático

La Fundación Kasparov nos habla de un experimento pionero que se llevó a cabo en una escuela de Alemania entre el año 2004 y 2007 en donde la mitad de los alumnos de primaria sustituyeron una clase de matemáticas a la semana por una clase de ajedrez.

Durante cuatro cursos consecutivos, este último grupo de alumnos obtuvo mejores resultados en matemáticas que el grupo de control que había recibido una hora más de esta asignatura pero ninguna de ajedrez.

matematicas

Y es que por el sólo hecho de jugar al ajedrez, el alumno realiza diversas operaciones matemáticas: desde el manejo de coordenadas cartesianas, hasta la geometría de los movimientos o las operaciones aritméticas para capturar las fichas del rival.

Mejora la inteligencia emocional

El ajedrez ayuda a mejorar la inteligencia emocional, es decir, la capacidad de utilizar la razón para gestionar adecuadamente las emociones.

Tal y como se explica en la web de ajedrez The Zugzang "si el cerebro racional no domina las decisiones que se producen en el tablero solemos encontrarnos ante decisiones de baja calidad". Por eso es importante el autocontrol en cada jugada, la concentración y la correcta gestión de las emociones.

Tiene las ventajas de los juegos de estrategia

El ajedrez enseña a los niños a planificar sus jugadas y a pensar de forma rápida para anticiparse a las del contrario. Ademas, les enseña a aplicar un pensamiento estratégico para resolver conflictos y mejora sus habilidades mentales, ayudando a prevenir el deterioro cerebral y la aparición de enfermedades degenerativas.

concentracion

Otros beneficios asociados son la mejora de la creatividad y la imaginación, el incremento de la capacidad lectora y el aumento del cociente intelectual.

Enseña a respetar al adversario

El ajedrez es un juego competitivo entre dos personas en el que no cabe el engaño ni las trampas, pues las reglas del juego son inmutables.

Además, al pasar tanto tiempo ante el adversario el niño aprende a respetarle, valorarle y conocerle, pues identificar sus puntos fuertes y débiles es fundamental para anticiparse a sus jugadas y ganar la partida.

Siempre es buen momento para jugar

Si además de todo esto sumamos que es una actividad muy económica y que puede practicarse en cualquier sitio y momento, ya no hay excusa para enseñar a los niños a jugar. Por suerte, esta actividad comienza a ganar adeptos y son ya muchos los colegios que han sabido ver los beneficios que tiene en los niños, incorporándola al programa de actividades extraescolares.

respeto

Y vosotros, ¿conocíais los increíbles beneficios que tiene para los peques la práctica del ajedrez?

Temas
Comentarios cerrados
Inicio