Hace un par de días te compartía la postura de la Academia Americana de Pediatría (AAP) acerca de los castigos físicos y los gritos como una forma de disciplinar a los niños: totalmente en contra. Y además de ello, publicó 10 claves para que padres y madres podamos educar sin gritos ni castigos.
Aunque son claves muy efectivas y positivas, algunas personas se preguntan cómo aplicarlas en sus hijos de acuerdo a su edad. Para ello, la AAP ha compartido también consejos de disciplina positiva por edades y etapas.
A través de su sitio web para padres, la AAP comparte artículos, consejos e información de interés acerca de la salud, crianza y cuidado de los hijos. Como parte de su reciente declaración publicada en su revista Pediatrics, han compartido y actualizado sus recomendaciones para llevar a cabo una crianza positiva en casa.
Te compartimos sus recomendaciones de consejos saludables y efectivos para llevar a cabo una disciplina positiva por edades y etapas en casa.
Bebés
Para los bebés, que se consideran desde recién nacido hasta los doce meses de edad, recomiendan lo siguiente:
Los bebés aprenden observando lo que tú haces, así que dale el ejemplo de los comportamientos que esperas de ellos.
Usa lenguaje positivo para guiar a tu bebé. Por ejemplo, en lugar de decir "No te levantes", dile "Es momento de estar sentado".
Guarda la palabra "no" para las cosas más importantes, como la seguridad. Limita el uso o la necesidad de decir "no", alejando objetos peligrosos o tentadores lejos de su alcance.
Distraerle y reemplazar un objeto peligroso o prohibido con uno que es apropiado para que él juegue, es una buena estrategia en esta edad.
Todos los niños, incluyendo los bebés, necesitan constante disciplina, así que habla con tu pareja, familia y cuidadores o niñeras, para sentar reglas básicas que todos deberán de seguir.
Niños pequeños
Para los niños pequeños o toddlers, cuyas edades oscilan entre uno y tres años, estas son sus recomendaciones:
Tu hijo comienza a reconocer lo que está permitido de lo que no, pero podría intentar probar algunas reglas para ver tu reacción. Presta atención y reconoce los comportamientos que te gustan, e ignora aquellos que deseas que deje de hacer. Redirecciona hacia una actividad distinta cuando sea necesario.
Los berrinches o rabietas pueden volverse más comunes mientras tu hijo tiene dificultades para dominar nuevas habilidades o situaciones. Reconoce y anticipa aquellas cosas que puedan ser un desencadenante de éstos, como el sentirse cansado o estar hambriento, y ayúdale a evitarlos con siestas y comidas a tiempo.
Enséñale a tu hijo a no golpear, morder o usar otros comportamientos agresivos. Modela un comportamiento no violento al no reprenderlo con castigos físicos y al manejar los problemas o diferencias con tu pareja de una forma constructiva.
Mantente consistente al poner límites. Intenta hacer pausas o momentos para tranquilizarle si es necesario.
Reconoce cuando haya conflictos entre hermanos, pero evita tomar partido. Por ejemplo, si surge una discusión acerca de un juguete, el juguete puede guardarse.
Edad preescolar
Los niños en edad preescolar son aquellos que tienen entre tres y cinco años, y para ellos recomiendan los siguiente consejos de crianza positiva:
Los niños en edad preescolar aún están tratando de entender cómo y por qué funcionan las cosas, así como el efecto que tienen sus acciones. Mientras aprenden acerca de un comportamiento adecuado, puedes esperar que aún continúen probando lo límites de padres y hermanos.
Comienza a asignarle tareas apropiadas para su edad, como guardar sus juguetes después de usarlos. Dale direcciones fáciles de seguir y paso por paso. Recompénsalo con un elogio cuando las cumpla.
Permite que tu hijo tome decisiones dentro de varias alternativas aceptables, redirigiendo y poniendo límites que sean prudentes.
Enséñale a tu hijo a tratar a otros como él desea ser tratado.
Explícale que está bien sentirse molesto en ocasiones, pero que no lastime a alguien o rompa objetos. Enséñales cómo gestionar sus sentimientos negativos de forma positiva, como hablando de ellos.
Para resolver conflictos, usa pausas o momentos para tranquilizarle, o eliminando el origen del conflicto (como el ejemplo del juguete).
Niños en edad escolar primaria
La AAP considera en este grupo a los niños de cinco a 12 años de edad, y sus recomendaciones son las siguientes:
Tu hijos comienza a entender la diferencia entre lo que está bien y lo que está mal. Habla con él acerca de las opciones que tiene en situaciones difíciles, de cuáles son las opciones buenas y malas, y de lo que podría suceder dependiendo de cómo decida actuar.
Hablen acerca de las expectativas que tiene su familia y de las consecuencias razonables en caso de no seguir las reglas familiares.
Provee un balance entre privilegios y responsabilidades, dándole a los niños mayores privilegios cuando siguen las reglas de un buen comportamiento.
Continúa enseñandole y mostrándole acerca de la paciencia, preocupación y el respeto hacia otras personas.
No permitas que tú y otras personas usen castigos corporales. Si vives en una zona o área en la que este tipo de disciplina está permitida en las escuelas, tienes el derecho de pedir que tu hijo no sea golpeado.
Adolescentes
El rango de edad de la adolescencia se considera de los 12 a los 18 años, y para esta etapa que puede volverse algo retadora para los padres, la AAP recomienda lo siguiente:
A medida que tu hijo desarrolle más habilidades independientes para tomar decisiones, deberás balancer esto con amor incondicional y apoyarlo con expectativas, reglas y límites claros.
Continúa mostrándole mucho afecto y atención. Haz tiempo cada día para hablar con él. Las personas jóvenes tienen mayores probabilidades de tomar decisiones saludables, si están más conectados o unidos a los miembros de su familia.
Conoce a los amigos de tu hijo adolescente, y habla acerca de relaciones responsables y respetuosas.
Reconoce sus esfuerzos, logros y triunfos en lo que hacen, y también en lo que no. Elogia su decisión de evitar el uso de tabaco, cigarrillos electrónicos, alcohol u otras drogas. Pon un buen ejemplo a través de tu propio uso responsable del alcohol y otras sustancias.
Con estos consejos de disciplina positiva de la Academia Americana de Pediatría por edades y etapas, será más fácil poder saber cómo actuar y guiar a nuestros hijos para que tengan un desarrollo saludable, sin necesidad de recurrir a castigos corporales o gritos.
Más información | Healthy Children - Academia Americana de Pediatría
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