Las plantas medicinales han sido utilizadas por sus efectos positivos para la salud durante siglos, pues por sus propiedades muchas de ellas nos ayudan a aliviar ciertos síntomas y también nos aportan diversos beneficios según sus componentes.
Entre las formas más comunes de utilizar este tipo de plantas encontramos las infusiones, que como sabemos consisten en introducir frutos, plantas o hierbas en agua hirviendo durante algunos minutos para posteriormente beberlos.
La infusión que queremos compartirte hoy quizás no es una de las más conocidas, como las de manzanilla o las de romero, pero después de conocer sus beneficios sin duda no la olvidarás, pues tiene grandes beneficios para nuestro cuerpo y nuestra salud. Se trata de la infusión de hibisco.
El hibisco y sus beneficios para la salud
El hibisco (Hibiscus) es una planta de la familia de las malváceas (Malvaceae), originaria de las regiones tropicales y subtropicales, con unas 150 especies aceptadas. La especie de la que hablaremos hoy es Hibiscus sabdariffa, que es conocida también como rosella y rosa o flor de Jamaica.
Además de proporcionar una refrescante bebida cuando es preparado para beberse frío, las infusiones de hibisco contienen diversas propiedades medicinales que lo hacen un té con grandes beneficios para nuestra salud.
Entre sus propiedades principales encontramos que tiene un efecto antiviral gracias a las antocianinas, que además de ser las responsables de su intenso color (y el de muchos otros alimentos rojos, azules y morados como el açai), son un antioxidante natural que ayuda a prevenir daños y enfermedades causados por la acumulación de radicales libre.
Este mismo antioxidante hace que la infusión de hibisco tenga beneficios para la salud cardiovascular. Algunos estudios han demostrado que puede ayudar a reducir la presión arterial y también tiene la capacidad de disminuir los niveles de colesterol malo y triglicéridos.
Adicionalmente a estas propiedades antivirales y antioxidantes y su conocido efecto diurético, la infusión de hibisco también contiene cantidades moderadas de potasio, calcio, magnesio y otros minerales.
Cómo preparar una infusión de hibisco
Como comentábamos previamente, además de disfrutarse como la popular bebida fría, el hibisco también puede prepararse y disfrutarse caliente a modo de té o infusión. Así es como puedes preparar una taza paso a paso:
Ingredientes
- 1 cucharada de flores de hibisco secas
- 1 taza de agua
- Jugo de limón (opcional)
- Miel o azúcar (opcionales)
Preparación
- Colocar el agua a hervir.
- Cuando el agua llegue al punto de ebullición, agrega las flores de hibisco, bajando un poco la temperatura.
- Después de un par de minutos, retira la infusión del fuego y tápala, dejándola déjala reposar por cinco minutos.
- Sirve la infusión en una taza (puedes pasarla antes por un colador) y bebe. Opcionalmente, puedes añadir jugo de limón o agregarle algún endulzante como azúcar o miel.
Foto de portada | Gary Barnes en Pexels