Una de las cosas que a la mayoría de mamás nos gusta hacer es comprar ropa para nuestros bebés. En esta época además, las prendas de punto son nuestras favoritas porque van monísimos y calentitos, aunque tiene una particularidad: necesita algunos cuidados especiales para evitar que salgan pelotillas y "enjevezcan" de forma prematura. Hoy os damos una guía completa para lucirlas siempre como el primer día.
Lee la etiqueta de la prenda
Antes de empezar a utilizar una prenda, y especialmente antes de lavarla, es fundamental leer las etiquetas de la ropa porque ahí encontrarás toda la información necesaria para su lavado y cuidado.
Durante el lavado
El lavado es un momento crucial para mantener en buen estado las prendas de punto, por eso asegúrate cuál es el método recomendado (si es a mano o en lavadora), y ten en cuenta lo siguiente:
- En caso de que lo hagas en lavadora, utiliza siempre en el programa para ropa delicada.
- Antes de hacerlo, dales la vuelta para evitar que se formen pelotillas e introdúcelas en una bolsa para lavadora de forma individual
- Utiliza un detergente especial para lanas.
- Inmediatamente después del lavado, estira la prenda para darle su forma original y evitar que se apelmace.
- Pon la prenda a secar en horizontal.
Presta atención al secado
El secado de las prendas de punto es un momento en el que debemos tener cuidado porque cuando están mojadas, son proclives a perder su forma y ensancharse demasiado.
Lo primero que debes hacer es retirar el exceso de agua envolviendo la prenda en una toalla seca y presionando ligeramente. Posteriormente debes ponerla en posición horizontal y en un sitio donde no se deforme, tenga una corriente de aire para que el agua se evapore, y donde no se exponga directamente a los rayos del sol. Nunca utilices la secadora.
Cómo guardar las prendas de punto
Las prendas de punto se deben guardar dobladas (sin hacer demasiados pliegues), en horizontal y haciendo montones pequeños. Nunca las cuelgues en una percha porque terminarán por deformarse.
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