He probado el truco que arrasa en España para cortar la cebolla sin llorar y funciona: papel de cocina

He probado el truco que arrasa en España para cortar la cebolla sin llorar y funciona: papel de cocina
Sin comentarios

Me gusta cocinar, y me encanta ponerle cebolla a las preparaciones, pero llevo realmente mal la tortura cada vez que las corto. Por eso, estoy atenta a todos los trucos posibles para evitarlo, desde las gafas para piscina de Arguiñano hasta los trucos de las abuelas de toda la vida.

Uno de los últimos que he probado que arrasa en TikTok y puedo decir que me ha funcionado aceptablemente bien es utilizar un papel de cocina o una servilleta de papel, algo que todos tenemos en casa.

¿Cómo funciona el truco del papel de cocina?

Es muy simple. Hay que doblar el papel de cocina o la servilleta de papel y mojarlo con agua, luego vamos a colocarlo en uno de los lados de la tabla sobre la que vamos a cortar la cebolla, haciendo que quede delante de ti.

¿Por qué la cebolla nos hace llorar cuando la cortamos? La explicación es que al cortarla "se rompen las células y esto provoca que una enzima convierta algunos amionácidos en ácidos gaseosos". Así lo explica la divulgadora y biotecnóloga Lucía Almagro (Diario de una científica) en su cuenta de Instagram.

Este gas contiene azufre (la cebolla lo absorbe de la tierra) que al mezclarse con el agua de los ojos forma "ácido sulfúrico". Esas moléculas se sienten atraídas por la fuente de agua que tengan más cerca y, por lo general, suelen ser nuestros ojos. Como el cuerpo humano es listo, "para evitar que se dañen los ojos, el cerebro manda la señal para llorar con el fin de diluir al máximo el ácido en los ojos".

Por eso, el truco de colocar un papel mojado delante de la cebolla hará que al cortarla, las moléculas vayan a esa fuente de agua y no a nuestros ojos.

Otros trucos para cortar cebolla

Hay algunos trucos más conocidos que otros para que la cebolla no nos haga llorar al cortarla. Uno de los más conocidos es meterla en el congelador durante unos minutos o en el frigorífico unas horas antes de cortarla para bajar la temperatura del tubérculo, así como cortarla sumergida en agua, pero esto último no es nada práctico.

Hay quienes ponen un poco de vinagre en el cuchillo para neutralizar los gases, pero esto transfiere algo de sabor a la cebolla. Lo que sí es importante es que el cuchillo esté bien afilado para hacer cortes limpios y así evitar desgarrar mucho las capas.

Así como alejarse lo más posible de la tabla al cortar la cebolla, estirando los brazos para que así las emisiones no vayan directamente a los ojos.

Temas
Inicio