Hace pocos días la actriz Drew Barrymore, harta de que le pregunten si está esperando un bebé, respondió en una entrevista en televisión "No estoy embarazada, estoy gorda", reclamando su derecho a engordar unos kilos sin la presión de un cuerpo perfecto.
No es la única famosa que se ha visto en esta situación, y tampoco la única mujer, ya que es bastante frecuente que hacia el final del primer trimestre la gente confunda la barriga incipiente de embarazada con gordura, y al revés: que estando con algo de sobrepeso crean que estás embarazada, como le ha sucedido a la actriz.
Drew Barrymore contó en el late night de James Corden lo que le había sucedido en un restaurante cuando una mujer se le acercó y le dijo: "Dios mío, ¡tienes un muchos hijos!". La actriz, un tanto sorprendida, le respondió que solo tenía dos y la señora contestó: "Más el que viene en camino".
La actriz le respondió que estaba gorda, no embarazada y salió del lugar intentando asimilar el comentario de la mujer.
La etapa gorda o embarazada
¿Te ha pasado alguna vez que alguien se haya confundido? ¿Te han mirado la barriga con ganas de preguntarte si esperas un bebé? ¿Te han felicitado sin que estuvieras embarazada? Mucha gente no tiene reparos en meter la pata y pregunta sin más "¿Estás gorda o embarazada?".
Suele suceder en esa etapa tan típica del embarazo, hacia el final del primer trimestre principios del cuarto cuando la barriga ya empieza asomar, pero no es lo suficientemente notoria.
A mi me pasó con mi primera hija, alrededor de las veinte semanas. Yo iba de pie en el autobús y a una señora se le fue enseguida la mirada hacia mi barriga. El tamaño no era tan evidentemente de embarazada (ya con la segunda y la tercera se me notaba antes) y la señora dudaba si ceder el asiento o no por si a lo mejor era solo una joven un poco entradita en kilos.
Me preguntó "¿estás embarazada?" y le respondí "sí, gracias". Se levantó y me cedió el asiento. Y añadió "enhorabuena, no sabía si estabas o no por el tamaño de tu barriga".
Hay personas que juzgan por la apariencia y se equivocan. Cuando estás embarazada no hay mayor problema, pero cuando tienes unos kilos de más y te preguntan si estás embarazada, no es tan agradable la confusión. La clave está en tomárselo con humor y no darle mayor importancia, como ha hecho la actriz.
¿Te ha pasado alguna vez? ¿Cómo te lo has tomado?
Foto | Gtres
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