Parece una pérdida de tiempo, pero no hacer nada mientras el bebé duerme será el mejor consejo que jamás te hayan dado

El bebé se ha dormido y es momento de hacer esas tareas pendientes de casa... o quizás no

Seguramente alguna vez has escuchado ese famoso consejo: "duerme cuando el bebé duerma". Y si eres madre, probablemente has pensado: "¿Y también limpio cuando él limpie y cocino cuando él cocine?", porque no es un consejo realista ni fácil de seguir.

Por un lado, porque con un bebé en casa las responsabilidades se triplican y, por otro, porque intentar dormir al mismo tiempo que el bebé haga la siesta, en especial si es uno que toma siestas muy cortitas, solo terminará en frustración cuando su llanto nos despierte a los pocos minutos de habernos quedado dormidas.

Sin embargo, hay algo detrás de ese consejo y a lo que no debemos restar importancia: la necesidad de hacer pausas y de tomar descansos. Por ello, hoy quiero hablarte de una alternativa más realista y que, en cierta medida, atiende a esa necesidad de tomarse un respiro.

No hagas nada durante las siestas del bebé

Suena como una pérdida de tiempo pues ¿cómo no vamos a aprovechar esos pocos o muchos minutos en los que no tenemos que estar cuidando al bebé para atender todos los demás pendientes de casa? Pues porque nuestras necesidades como madres también son importantes.

Es cierto: estas no son "una tarea" por hacer y quizás hay otras cosas que podríamos considerar esenciales o más apremiantes, como preparar la comida o lavar las prendas que llevan bastantes días en el cesto de la ropa sucia. Pero enfocarnos en aprovechar siempre las siestas del bebé para hacerlo todo acaba en agotamiento.

Como lo mencionaba al inicio, dormir cuando el bebé duerma es complicado porque muchas veces sus siestas son cortas y también es posible que no nos apetezca dormir a las mismas horas que él. Y aquí es cuando encontramos una mejor alternativa: "no hacer nada".

Parece pérdida de tiempo, pero sirve mucho

Foto | Ekaterina Bolovtsova en Pexels

Las personas, pero sobre todo las madres, solemos ver el no hacer nada o tomarnos un tiempo para nosotras como una pérdida de tiempo, un desperdicio de oportunidades y de momentos que bien podríamos aprovechar para hacer cosas productivas o de valor (¡y hasta nos sentimos culpables por ello!).

Pero, como ya lo hemos explicado en otras ocasiones al hablar de autocuidado, tenemos que entender que muchas actividades que no parecen productivas también son beneficiosas: nos permiten hacer una pausa y desconectar. Cuando no hacemos nada, le damos a cuerpo y mente un espacio para descansar.

Y ese "no hacer nada" puede verse de distintas maneras para cada persona.

Por ejemplo, para algunas personas no hacer nada puede ser beberse una infusión sin prisas o leer un par de páginas de un libro, mientras que para otras puede ser simplemente sentarse en el sofá, hojear una revista o mirar el móvil por unos minutos.

¿Suenan todas estas cosas como una pérdida de tiempo? Tal vez. Pero lo que no podemos negar es que son momentos en los que nos permitimos ir más despacio, recargar un poco de energía y dar un respiro a nuestra mente y a nuestro cuerpo para después retomar el ritmo del día.

Si bien no recomendamos ponerlo en práctica durante todas las siestas del bebé -porque es verdad que las cosas no se harán solas-, hacerlo de vez en cuando nos da la oportunidad de tener un espacio a solas y en calma, que incluso podemos aprovechar para reconectar con nosotras mismas.

Foto de portada | Grafik Bock en Pexels

Ver todos los comentarios en https://www.bebesymas.com

VER 0 Comentario