Nueve beneficios para los niños de escribir a mano

Es cierto que cada vez escribimos menos a mano. El papel y el lápiz han caído en desuso, y a medida que nos hacemos mayores cada vez utilizamos menos un bolígrafo para escribir. Si acaso para firmar algún documento, práctica que pronto también caerá en el olvido.

Pero no debemos olvidar que la escritura a mano en los niños tiene importantes beneficios para su desarrollo. Más allá del uso que puedan llegar darle en el futuro, la práctica de la escritura en los primeros años de vida tiene grandes ventajas, que enumeramos a continuación.

1) Fomenta la creatividad

Activa el cerebro del niño. Al practicar la caligrafía, la actividad neuronal se incrementa involucrando mecanismos cognitivos más complejos a nivel creativo.

La escritura "artesanal", pausada, con bolígrafo o lápiz, es más propensa a dejar volar la imaginación, a que surjan nuevas y originales ideas.

2) Facilita la capacidad de aprender

El cerebro se involucra de manera diferente cuando escribimos algo a mano que cuando lo escribimos en un teclado o tocando una pantalla.

Los estudios muestran que escribir mejora la memoria y que los estudiantes retienen mejor el aprendizaje cuando trabajan con nuevas ideas a mano en lugar de teclear.

3) Mejora la memoria

Al escribir los conceptos a mano, esta práctica ayuda a fijar conceptos en la memoria de manera permanente hasta interiorizarlos, mucho mejor que si se teclean.

Hay estudios neurológicos que han demostrado que al escribir a mano se activan más regiones cerebrales, favoreciendo el aprendizaje de formas, símbolos y lenguas, lo cual ayuda a fijar los conceptos. En el acto físico de escribir, las señales que comunican las manos al cerebro construyen una memoria a largo plazo.

4) Favorece el pensamiento lógico

Cada vez que enlazan una letra con la siguiente, están tomando pequeñas decisiones haciendo un ejercicio de razonamiento lógico constante.

4) Mejora la concentración

Escribir a mano hace que el niño pueda enfocarse solo en esa actividad, sin distraerse como puede suceder frente a la pantalla de un ordenador o de una tablet.

4) Desarrolla la motricidad

La ejecución de los primeros trazos es muy importante para reforzar la psicomotricidad en los niños. Y no sólo el dibujo de líneas, el agarre en forma de pinza que realiza el niño al coger un lápiz entre el dedo pulgar e índice es un gesto fundamental para la evolución de la destreza manual.

Por supuesto, esa motricidad fina les ayuda a seguir aprendiendo y realizando cada vez acciones más complejas, desde dibujos detallados a otras manualidades... Tal vez muchos cirujanos, cocineros o pintores adquirieron un pulso especial practicando la caligrafía...

La escritura manuscrita es fundamental para el desarrollo cognitivo del niño, ya que involucra procesos cerebrales como el área visual, el área motora, la lógica y la memoria.

5) Favorece la lectura

Es especialmente importante la escritura a mano en el caso de los niños que están aprendiendo a leer, ya que estimula funciones cerebrales relacionadas con otras áreas como la lectura.

Según un estudio realizado en la Universidad de Indiana, EE.UU. los niños que escriben a mano a aprenden a leer más rápido, y también son mejores para retener información y dar con nuevas ideas.

6) Mejora la ortografía

Al escribir a mano pueden darse cuenta de forma más evidente de las faltas de ortografía, sin la ayuda del corrector ortográfico del ordenador, haciendo que mejoren en este aspecto.

Los niños que practican la escritura a mano obtienen mejores resultados en lectura y ortografía.

7) Mejora la redacción

A la hora de redactar, es importante organizar las ideas antes de volcarlas en el papel. El teclado facilita borrar, escribir y volver atrás cientos de veces si nos equivocamos, algo que no podemos hacer si escribimos a mano.

Las investigaciones avalan que la fluidez en la escritura a mano está fuertemente relacionada con la calidad y cantidad de los textos escritos complejos de los estudiantes.

8) Es reflexiva y relajante

La redacción manuscrita es un proceso más lento que la escritura con teclados físicos o virtuales, lo que permite a nuestro fluir de ideas ser más continuo al tiempo que pausado, que nos detengamos más a pensar.

La escritura a mano es un momento de calma, una especie de terapia gráfica que ayuda a relajar el estrés. Centrar la atención en una actividad con atención plena, en este caso en los trazos que van haciendo, tiene un efecto relajante.

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