Por esta razón, el estudio intenta que los pequeños puedan estar hasta tres años sin necesidad de seguir el tratamiento y sin efectos adversos que puedan repercutir en la salud haciéndola aún más deficiente. En el campo del VIH son muchos los investigadores que trabajan para obtener resultados más positivos y que ayuden a los más pequeños que luchan contra la enfermedad.
Cada año aparecen nuevos casos de niños infectados con VIH, durante este año han sido tres los casos diagnosticados. Por fortuna, las nuevas medidas farmacológicas preventivas adoptadas durante todo el proceso del embarazo y del parto ayudan a identificar e iniciar el tratamiento precozmente contra la enfermedad, ayudando en la medida de lo posible a que los pequeños tengan una mejor calidad de vida.
Vía | Web Salud