El nuevo páncreas artificial dará una mejor calidad de vida a sus portadores, ya que serán innecesarias las continuas inyecciones y pinchazos para controlar y administrarse la insulina necesaria, hay que tener en cuenta que los niños con diabetes del tipo 1 necesitan inyectarse al menos 6 dosis de insulina diarias, siendo un proceso pesado y poco preciso para regular la glucosa de la sangre. El nuevo aparato tendrá como novedad un sensor y un programa informático capaz de calcular la necesidad de insulina en el organismo para poder regular la glucosa, además contará con una bomba de insulina que se encuentra interrelacionada con el programa informático, proporcionando una efectividad similar a la de un páncreas normal en cuanto a producción y coordinación con el organismo se refiere.
Cada nuevo paso, cada logro, cada triunfo, acerca a los niños aquejados de distintos males, a una mejor calidad de vida.
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