Para llegar a esta conclusión, la Oficina del Censo del país se ha basado en el siguiente cálculo matemático: hay un nacimiento cada siete segundos, una muerte cada 13 segundos y un nuevo inmigrante cada 31 segundos. El resultado es que aparece un nuevo residente norteamericano cada 11 segundos.
En 39 años se han pasado de los 200 millones a los 300 millones de habitantes, el bebé número 200 millones fue un bebé hijo de inmigrantes chinos, esta vez le toca a un hispano.
Podría pasar como en España y seguramente lo harán en otros países, que a los primeros bebés que nacen tras las campanadas de Nochevieja, ciertas empresas u organismos proporcionan un regalo especial para el pequeño. Sería curioso localizar al bebé y determinarlo como el habitante número 300.000.000, hay que tener en cuenta que norteamérica es la tercera nación más poblada del mundo.
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