Mary Toft, la mujer que parió 17 conejos

Mary Toft, la mujer que parió 17 conejos
15 comentarios

¿Habéis soñado alguna vez que dabais a luz no un bebé sino algún ser deforme o incluso un animal? Mary Toft dijo (y mostró) a la sociedad que había dado a luz conejos, pero no en sueños. En 1726 se produjo en Inglaterra este engaño bien curioso, que logró interesar a médicos y hasta a reyes, convirtiéndose en una leyenda urbana.

Mary Toft era una sirvienta de unos 25 años que logró convencer a varios médicos de que había dado a luz conejos. La historia es bastante insólita y se me escapan las razones por las que formó este embrollo, aunque si estuviéramos en nuestros días tal vez podríamos hablar de personaje con ansias de montaje para aparecer en la prensa rosa.

Para convencer a los médicos no se le ocurrió otra cosa que introducirse diversas partes de conejos en la vagina, no conejitos vivos y coleando como muestran ilustraciones que representan este insólito hecho. Tras hacerlo, se fue al médico local para que la ayudara a dar a luz.

Ya podemos decir que los médicos han visto de todo en el paritorio, pero, ¿os imagináis la cara del médico cuando viera "coronar" unas orejas de conejo?

El médico creyó este alumbramiento de pesadilla pero no pudo callarse lo que consideraba una curiosidad médica mayúscula, así que el rumor se extendió, y no sólo entre la comunidad médica. El mismo rey de Inglaterra envió a sus cirujanos personales a entrevistarse con la señora Toft.

La explicación que imprimía de veracidad al hecho de parir conejos era una creencia médica denominada "Impresión Maternal", una teoría falsa que aseguraba que cualquier impresión o experiencia de la madre podía tener un efecto sobre el feto en gestación. Mary Toft aseguraba que antes de dar a luz había sentido un irrefrenable deseo de comer conejo, que solía soñar con ellos y que dedicaba largas horas intentando capturarlos en el jardín de su casa.

Así que los médicos, tras examinar las partes de conejo dadas a luz no dudaron de que el asunto era cierto. Por lo que se llevaron a la sirvienta a Londres, donde finalmente parece ser que confesó el engaño y fue encarcelada, tal y como se detalla en un ejemplar de un periódico de la época.

Sin embargo, antes de ir a la cárcel fue seguida de cerca por un equipo de médicos que relata cómo la mujer tenía, día tras día, dolores de parto, contracciones, movimientos en el vientre... aunque en esta ocasión no salió ninguna sorpresa como se podía esperar de aquella chistera. ¡Menuda interpretación!

La investigación señaló que el marido de Mary Toft había comprado varios conejos de diferentes colores antes del extraño suceso. Sin embargo, tras cuatro meses internada fue liberada sin haber sido enjuiciada: no había podido demostrarse su culpa, y por lo tanto, quién sabe si aquello no era verdad... La historia debió rondar por aquellos lares una buena temporada alimentando los cuentos de vieja, de jueces y de médicos.

Parece ser que la mujer había sufrido un aborto espontáneo, y se me ocurre que tal vez este acontecimiento podría haberla desequilibrado mentalmente hasta hacer esta barbaridad, quién sabe si en complot con su marido.

Aquí podéis ver otra ilustración que muestra a la mujer pariendo conejos ante un tribunal. Conejos que salen en hilera y correteando como si estuvieran en el campo. Y en inglés tenemos una explicación más extensa del asunto.

Vemos representada de nuevo la insólita historia de Mary Toft, la mujer que parió 17 conejos e hizo un buen montaje aun a riesgo de su salud, su reputación y su libertad. Vuelvo a decir que me cuesta entender con qué intención...

Vía | La brújula verde En Bebés y más | La madre más joven del mundo, Embarazada de doce bebés, El primer instrumento quirúrgico servía para cortar el cordón

Temas
Comentarios cerrados
Inicio