La receta de cookies de chocolate es ya un clásico entre las recetas de repostería. Fue inventada en 1930 (no se sabe si fue por casualidad o intencionadamente) cuando Ruth Wakefield añadió unos trocitos de chocolate a su masa de galletas de siempre y resultaron ser todo un éxito entre los clientes de su hotelito de Boston “Toll House”.
Actualmente existen tantas variantes de la receta de cookies de chocolate como familias en EE.UU. (es un decir, por supuesto). En bebesymas.com queremos es que disfrutéis del tiempo libre con los hijos, hoy os dejaré una variante para preparar con ellos. Además, esta receta contiene dos ingredientes que no llevan las cookies de chocolate tradicionales: ingredientes que contienen una bomba de propiedades beneficiosas para su alimentación: la avena y el plátano.
Propiedades del plátano
Como todos sabéis, la fruta es un alimento indispensable para todos. El plátano en concreto es la fruta por excelencia para los niños, es una fruta muy energética (90 kcal por 100 g) y rica en proteínas. Una cosita que debéis saber es que cuanto más maduro sea el plátano, más rico en vitamina C, azúcares simples y almidón será. Tiene muchísimo postasio, hierro, cobre, calcio, magnesio y vitamina B.
Propiedades de la avena
La avena es un alimento que todos deberíamos consumir a diario (os recomiendo que leáis esta entrevista a Miquel Pros en La Contra de La Vanguardia). Es un cereal muy rico en fibra, cuya acción sobre la regulación del tránsito es bien conocida, y también tiene un efecto favorable sobre la regulación del colesterol y la glicemia sanguínea. Es rica en proteínas y en grasas mono y poliinsaturadas (las famosas "grasas buenas"). Añadamos que está repleta de hierro, fósforo, magnesio y vitamina B.Receta de cookies de pepitas de chocolate con plátano y avena
Y ahora, vamos con lo que nos gusta a todos: cocinar con niños. Hacer galletas es una de las recetas más fáciles para cocinar con los hijos, pues prácticamente no conlleva ningún procedimiento peligroso (excepto el momento de hornear, momento que deberá ser supervisado siempre por un adulto).Una cosa que debéis tener muy en cuenta a la hora de cocinar con niños es tener todos los ingredientes preparados, ya pesados. Sobre todo si son más pequeños. Mi hijo de dos años se impacienta entre paso y paso y alguna que otra vez, si me despisto para ir a buscar algún ingrediente, me he encontrado la mezcla con el bote de canela dentro entero...
Ingredientes (para 50 galletas)
- 180 g de mantequilla reblandecida (sacarla al menos 2 horas antes de la nevera)
- 175 g (1 taza) de azúcar moreno
- 1 huevo
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 225 g (1 1/2 tazas) de harina blanca (tamizada)
- 1/2 cucharadita de bicarbonato de soda (tamizado)
- 1 cucharadita de canela (tamizada)
- 1 taza de plátano machacado con un tenedor (2 plátanos medianos)
- 190 g (1 taza) de pepitas de chocolate
- 180 g (2 tazas) de copos de avena
Preparación
- Precalentamos el horno a 180ºC (350ºF).
- Ponemos la mantequilla y el azúcar en un cuenco grande y lo mezclamos (podemos utilizar unas varillas o una batidora automática), si utilizáis varillas, según la edad de vuestro hijo, podéis dejar que ellos mismos las sujeten. Mezclamos durante unos 5 minutos.
- Ahora seguimos mezclando con una cuchara de madera y añadimos el huevo, batiendo hasta que esté bien mezclado.
- Añadimos la harina junto con el bicarbonato de soda (ya tamizados), la canela y el plátano y seguimos mezclando.
- Añadimos las pepitas de chocolate y la avena, mezclamos bien. Os quedará una pasta espesa.
- Ponemos papel vegetal en una bandeja de horno. Hacemos bolas con la masa (utilizando la medida de una cucharada llena). Vamos poniendo las bolas de masa en la bandeja de horno y las chafamos un poquito para aplanarlas. Debéis tener cuidado con dejar espacio suficiente entre galletas pues en el horno se ensanchan y podrían tocarse las unas con las otras.
- Horneamos durante unos 12-14 minutos hasta que estén ligeramente doradas.
Para que se conserven mejor, se recomienda dejarlas en la nevera al menos durante 2 días. Podéis preparar la masa y hornearla al día siguiente (conservándola en la nevera). También se puede congelar la masa.
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